Baloncesto y Coronavirus

La rápida expansión del Coronavirus, el confinamiento al que nos enfrentamos y la afectación global ha afectado, indiscutiblemente, a todo el mundo. En los primeros ámbitos en los que empezamos a notarlo fue en los eventos deportivos, que cerraban sus puertas a aficionados e iban aplazando jornadas para evitar contagios. Baloncesto y Coronavirus no son compatibles.

El baloncesto no se quedó atrás en esta situación, sino que fue de los primeros en ver modificadas sus rutinas.

La NBA y el Coronavirus

Cuando esta situación parecía aún lejana, la NBA comenzó a tomar algunas medidas. Por ejemplo, las ruedas de prensa se hacían de una manera menos multitudinaria y algunos equipos como los Warriors ya habían aceptado que sus partidos fuesen a puerta cerrada, sin público.

Casi antes de que estas medidas entraran en vigor, todo empezó a alterarse en la NBA. Rudy Gobert, de los Utah Jazz, dio positivo en Coronavirus, solo unos días después de «reírse» de las medidas que se pretendían tomar. Gobert, en una rueda de prensa, comenzó a tocar todos los micrófonos y elementos que había en la mesa, hecho que habían pedido que se evitase a toda costa para eliminar posibles contagios.

Esta noticia daba por hecho que su equipo tendría que pasar un tiempo en cuarentena, frenando todos los enfrentamientos que tuvieran en el calendario los siguientes 14 días. Sin embargo, la NBA decidió directamente dar un paso al frente y frenar la curva de contagios que pudieran provocar.

Aplazamiento de la NBA

La noticia del positivo se dio a conocer justo antes del partido que enfrentaba a los Utah Jazz contra Oklahoma, el 12 de marzo. Todo estaba preparado para que comenzara el partido, los jugadores habían saltado a realizar el calentamiento y las gradas estaban llenas de aficionados. Sin embargo, la noticia saltó y, aunque Gobert no se había desplazado al Chesapeake Energy Arena de Oklahoma, el riesgo de que entre sus compañeros o el equipo técnico hubiese más casos, era posible.

La NBA suspendió el partido y decidió también la suspensión de la competición. El principal motivo al que se alegaba es que los Utah se habían enfrentado a otros equipos, que también deberían pasar a un aislamiento para evitar propagar el coronavirus. Con tal de no perjudicar ni beneficiar a ninguna franquicia, la decisión de la NBA fue rotunda: suspensión total.

Parón en la Liga Endesa por el Coronavirus

En la ACB la situación fue pareja. Se optó por jugar las jornadas 24 y 25 a puerta cerrada, con el mínimo personal posible De esta manera, se pretendía evitar los eventos multitudinarios, tal y como se había pedido nivel estatal.

Pasados unos días, La Liga Endesa, un día antes de ocurrido en Estados Unidos, decidió aplazar las dos jornadas siguientes. Así, el 11 de marzo estableció que se frenaría competición hasta que corrieran estas dos jornadas.

En vista de lo sucedido los siguientes días, el Estado de Alarma provocaba que fuesen únicamente estas dos jornadas las que se viesen alteradas. Tras una reunión con todos los dirigentes, se estimó que, hasta el 24 de abril, como mínimo, no se reanudaría la competición.

Partidos de la Euroliga

En la Euroliga fue donde comenzaron a verse los, tan extraños, partidos a puerta cerrada. La falta de ambiente y el escuchar cada comentario de jugadores y cuerpo técnico parecía insólito y una medida algo ?extrema?.

Ya el 5 de marzo, en el que el Valencia Basket se enfrentaba en España al Armani Milan, la Euroliga optó por que el partido se jugase a puerta cerrada. Se trataba así de frenar la expansión ya que los casos en Milán y el Norte de Italia comenzaban a ir en aumento.

Tras anunciar otra serie de medidas para sus partidos, como la eliminación de las ruedas de prensa o promover otros partidos a puerta cerrada, todo acabó avocando también a la suspensión.

El 13 de marzo se hizo oficial que, tanto la Euroliga como la Eurocup, quedaban suspendidas hasta, al menos el 11 de abril. Ahora se sabe que esta fecha será también superada sin que los partidos entre los principales equipos europeos retornen estas competiciones.

Sueldos de los jugadores

La NBA ha afirmado que podrá garantizar el sueldo de los jugadores hasta el 1 de abril, sin embargo, se sabe que esa fecha se superará sin avance en la pandemia. En adelante, es posible que, siguiendo un convenio firmado en 2017, se produzca una reducción de salario de casi el 1% por cada partido no jugado debido a una causa mayor, tal y como ocurre por el coronavirus.

La generosidad de muchos jugadores NBA se ha visto demostrada ya que han donado parte de su salario a los trabajadores del club, que si podían ver descendidos sus ingresos. Jugadores como Love, Antetokounmpo, Williamson o Griffin han donado más de 100.000 dólares, cada uno, para sufragar sus sueldos.

En la ACB, la reducción de sueldo si es un hecho. Muchos clubes se han acogido a los, ya conocidos, ERTEs para hacer frente a la situación. Así, el Baskonia, el Baxi Manresa, el Estudiantes, el Fuenlabrada, el Barça o el Basket Zaragoza son algunos de los equipos que han tenido que optar por los ERTEs para hacer frente a la crisis económica que acarreará el parón de la competición.

Ligas inferiores

Ni que decir tiene que, en ligas inferiores, como la Liga LEB en España, estos ceses temporales de empleo han sido también frecuentes. La rebaja porcentual en el sueldo de los jugadores profesionales, así como el aprovechamiento de las medidas facilitadas por el Gobierno, son la tónica a seguir para evitar la quiebra en los clubes que pueden tener problemas económicos a corto plazo.

Resulta paradójico que una de las personas al que más trabajo se podría haber enfrentado estos días para defender el sueldo de los jugadores de baloncesto, ha sido uno de los más afectados. Nos referimos a Alfonso Reyes, el presidente de la Asociación de Baloncestistas Profesionales, quien confirmó el 14 de marzo que había dado positivo.

Alfonso Reyes ha narrado a través de su Twitter (@alfreyes14) como ha trascurrido el curso de su enfermedad, de la que ahora se encuentra, afortunadamente, recuperado.